domingo, 10 de octubre de 2010

Trinxa 10/10/10

Todo empezó una plácida tarde cuando estaba tranquilamente delante del ordenador y recibo la noticia de que Julio se apunta a la trinxacadenes,  me avisa de que con el precio entra una camiseta técnica y unos manguitos, no hace falta hacer muchos números para darse cuenta  de que si la pedalada son 15 euros pues la verdad que sale a cuenta y es una de las míticas pedaladas bien conocidas por su exigencia y diversión en las bajadas, entonces entro a mirar en la web de la trinxa cuantas inscripciones quedan aun y veo que el límite son 600 inscripciones y van por el 560 mas o menos, entonces no me lo pienso mas y me apunto sin consultar mi agenda, julio por disponibilidad de tiempo se apuntó a la corta que eran unos 15 km, a mi me da miedo quedarme corto y me apunto a la larga, una vez hecha la inscripción me busco en la lista y no aparezco, me vuelvo a buscar con mas calma y tengo el dorsal 288, tanta prisa para nada ya que los apuntados a la corta empezaban a repartir dorsales en el 500 por eso parecía que estaba apunto de llegar al límite de participantes.


Hasta aquí todo parece normal pero cuando consulto mi agenda me doy cuenta que el día antes es la subida al turó de l'home, empieza a caerme la gota de sudor frío por la frente y empiezo a divagar, donde me he metido? como me lo voy a montar? ya responderán mis piernas? y si no voy?


Para complicarlo todo un poco mas se anuncian lluvias para el día de la trinxa, empiezo rezar, quizás la anulan y me dan los regalos que al fin y al cabo era por lo que me había enganchado. Cuando suena el despertador el domingo puedo oir la lluvia en el exterior cayendo con fuerza, no se que hacer al final me visto de romano y monto la bici en el coche parece que llueve menos, llego a montornès donde había quedado con julio y llueve a mares, lo llamo y le pregunto si ha visto la que esta cayendo, decidimos acercarnos a la cursa y haber que pasa. Cuando llegamos a Vallromanes ya casi no llueve, quizás tenga suerte y si con el dorsal me dan los regalos me voy para casa y paso de sufrir. Pero no es así y me dan mi dorsal, si queremos los regalitos nos lo tendremos que ganar.


Empieza la cursa y empezamos por unas rampas bastante fuertes, mis piernas no responden bien e intento en medio de la muchedumbre coger mi ritmo sin forzar subimos durante un buen rato y me sorprendo de que puedo ir sorteando la subida mejor de lo que pensaba, empezamos a bajar por caminos estrechos con un poco de barro y después mas subidas, hasta llegar a un tramo de pista bastante rodador pero no puedo ni rodar a buen ritmo, me limito a poner el gas al mínimo para poder avanzar sin subirme de pulsaciones ni cargar mas las piernas, al poco rato veo un maillot de BTT zona alta y decido probar suerte para saber si es Sergio grito su nombre y bingo!! sí que es hacía varios años que no nos veíamos y me he hecho ilusión por fin haber coincidido con él en una pedalada ya que en la portals no nos pudimos ver. Ahora toca un tramo de corriol técnico de subida, el barro se pega y cuesta mas de lo normal cuando se pone muy dificil pongo pie a tierra, no pasa nada, no vengo a hacer tiempo e intento, dentro de mi sufrimiento, disfrutar la pedalada en la medida de lo posible, por fin llegamos al avituallamiento y me lo tomo con calma incluso se podría decir que he desayunado en el avituallamiento con donut incluido. 


Aun nos quedaban unos cuantos kilómetros para terminar la corta ya que la larga hoy no era factible, al poco de salir del avituallamiento han empezado una serie de corriols muy rápidos y bonitos, después un poco mas de subida y trialeras de bajada técnicas pero ciclables y mas adelante bajadas con barro negro que daba igual si girabas o no la rueda, la bicicleta bajaba por inercia propia, como si tuviera vida por si misma, y para rematar los últimos kilómetros mas corriol de subida donde hemos coincidido con los de la larga y se ha pasado bastante mal ya que la diferencia de velocidades es muy grande, a mi un poco mas y me tiran en una trialera y otro compañero se ha caído porque te van apretando por detrás y te ponen mas nervioso y lo inevitable sucede. Al finalizar nos han dado nuestro premio entonces ha empezado a llover y en cuanto he terminado la butifarra me he ido corriendo.


En fin, ha valido la pena hacer el sacrificio, la trinxa se ha ganado el nombre que lleva, pero sobretodo he podido disfrutar de unos senderos embarrados que siempre ayudan a recordar el espíritu del niño que disfruta embarrándose sin complejos por el solo hecho de estar disfrutando de lo que esta haciendo.


Preparado para salir


En la meta con las gafas empañadas y un poco mas sucio.

En plena acción con cara de asqueado porque no veia nada através de las gafas


2 comentarios:

  1. Jordi.. eres imparable.. tio!!!!! lo de makina que te escribí ayer... eso es na pa ti!!!!como sigas a este ritmo. no te vamos a pillar ni con moto!!!! jaajajjajajaja saludos campeon!!!!!

    ResponderEliminar
  2. Muy guapa esa cronica . Toti eres un crak.

    ResponderEliminar